No estás solo…
¡El Señor está contigo!
Durante más de 25 años las iglesias se han unido, a través de la SBC de Virginia, para promover el Evangelio de Jesucristo llegando al prójimo y a las naciones. Nuestra oración es poder ver iglesias fuertes con un compromiso sólido con la Gran Comisión (Mateo 28:18–20). En estos últimos años hemos abrazado este pensamiento de: «¡No estás solo!» Entonces nos hemos visto en la necesidad de asociarnos con esta misión para animarnos los unos a los otros; sin embargo, debemos tener muy presente este fundamento de “No estás solo”, Recordemos que Jesús dijo:
“Y he aquí, yo estaré con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Mateo 28:20 NVI.
Al decir: “No estás solo” recordamos la asombrosa promesa bíblica de saber que: “El Señor está contigo”. Vemos a lo largo de las escrituras la importancia de la Presencia de Dios en la vida de líderes como: Moisés, Josué y muchos otros. Durante un tiempo de exilio y de tremenda agitación política para el pueblo de Dios nuestro Señor Dios les habló por medio del profeta Isaías:
“ 10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”. Isaías 41:10 RV
En el Reencuentro anual de la SBCV de este año, en Roanoke, hemos pedido a la asociación de iglesias de la SBCV y a nuestros hermanos y hermanas en Cristo que celebren Su Presencia y busquen Su Rostro como nunca antes. No quiero servir y no debemos tratar de liderar sin primero buscar del Señor y depender de Su Presencia y de Su Poder (Éxodo 33:15).
En enero del 2023 tendremos un llamado especial para estar en oración ferviente por nuestros pastores; y, a lo largo de todo el año, también nos animaremos los unos a los otros mientras nos respaldamos en oración y aceptamos la Presencia de Dios en nuestro trabajo conjunto, sirviendo de muchas maneras, como: en el socorro en casos de desastres, en el plantar y revitalizar iglesias o enviando misioneros… siempre teniendo como prioridad la necesidad de que sea El Señor Quien nos guíe y nos capacite.
Estoy tan agradecido de que podamos decirnos los unos a los otros que «No estás solo». Mientras el Señor nos lleve a hacer discípulos a las naciones recordémonos los unos a los otros de la promesa de Su Presencia: “El Señor está contigo”. ¡Alabado sea el Señor por Su Presencia!
Su hermano en Cristo,
Brian Autry